El problema de las Fake News

Cada día es más común ver fakes news en nuestra cuenta de Twitter, Facebock o Instagram o incluso en la misma televisión y la reflexión es saber si de verdad somos conscientes del peligro que puede causar este tipo de desinformación en la era de la mayor información.

¿Cuáles pueden ser las consecuencias directas de las Fake News?

Para empezar, debemos de advertir que son una amenaza directa para lo que hasta el momento se han hecho llamar medios de comunicación (periodismo, televisión, radio, redes sociales). Y esta amenaza se manifiesta en la altísima cantidad información que nos llega, el afán fugaz por conseguir clics o compartir información rápida sin contrastar, mirar, leer o calificar. Esto crea la actitud de ciudadano que consume noticias sin estar informado y de poca calidad.

Según las investigaciones realizadas por el Media Lab del “Massachusetts Institute of Technology” han descubierto que las noticias falsas tienen un poder preocupante, pues llegan a más gente que aquellas de contenido verídico. Incluso, no sólo son las que mayor alcance poseen, sino que han alterado el criterio, digamos del sentido común, para no saber distinguir entre lo que es cierto y lo que es falso. Para el caso de España, un 86% de los españoles no distingue con facilidad las noticias inventadas de las reales. Y esta es la amenaza.

¿Cómo combatir las Fake News?

Siendo conscientes de las nefastas consecuencias que las Fake News pueden acarrear no es de extrañar que se estén visualizando en un futuro inmediato nuevas reglas a la hora de aplicar y colocar noticias en las plataformas digitales. Recordemos que no hace muchos años, se planteó esta idea y fue unánimemente rechazado. Sin embargo, por culpa de las frecuentes estafas, fraudes, robos de datos personales, divulgación de noticias falsas, ridiculizaciones públicas,… la cuestión ha cambiado.

Pensemos que la cantidad de información que se mueve en la red es casi ilimitada y circula a una velocidad en la que es casi impensable pensar en el presente y recordar la noticia de ayer. En cierto modo, esta es una de las razones por la que las noticias falsas entran en el panorama diario cual caballo de Troya. Por ello, Google, por un lado, está intentando combatir este problema desde hace un tiempo por medio de algoritmos de análisis. Y por otro, Faceboock y Twitter ya han tomado cartas en el asunto colocando en sus plataformas alertas acerca de este tipo de información falsa.

¿Y qué se puede hacer?

Para devolver la confianza a los ciudadanos es importante no solo que existan plataformas que sean serias a la hora de informar, sino también favorecer en las escuelas un espíritu crítico para crear futuros ciudadanos que sepan distinguir una falsedad de una veracidad con las herramientas necesarias que permitan dar credibilidad al contenido, no que consumimos, sino que recibimos.

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